Qué dice la Biblia sobre la Masturbación

La masturbación y la Biblia:

En estos tiempos modernos y tan llenos de cambios acelerados, es normal encontrar a un sinfín de personas seducidas y algunas controladas por la práctica de la masturbación. Un problema el cual, desafortunadamente la iglesia también padece.

En nuestra sociedad, la masturbación se ha convertido en una verdadera pandemia global. Un tema delicado y controversial, tanto, que mientras pasan los años unos cuantos estudios, que han encontrado algún respaldo científico, revelan supuestos beneficios y, que combatir este hábito sería perjudicial para el practicante.   

Y ante estos informes, desafortunadamente muchos cristianos han cedido ante estas tesis, volviéndose cada día mas permisivos con la practica y generando unos serios problemas en sus hogares y personalidades. 

Por eso como hijos de nuestro Señor y como luz y sal que somos, buscamos respuestas en la Biblia para entender si esta práctica es aceptable o no a la luz de la fe cristiana; es por eso que queremos hacer una pequeña reflexión sobre el tema, y mostrar lo que la Palabra de Dios dice al respecto y ofrecer orientación desde esa perspectiva.

¿Qué dice la Biblia de la masturbación?

La Biblia no menciona directamente la masturbación, lo que puede llevar a interpretaciones diversas. Sin embargo, podemos extraer principios bíblicos para guiar nuestras acciones. En 1 Corintios 6:19-20, se nos recuerda que nuestro cuerpo es un templo del Espíritu Santo y que debemos glorificar a Dios con el. Esto implica cuidar nuestro cuerpo y mente, y evitar cualquier práctica que lo deshonre.

El propósito del sexo según la Biblia.

Dios diseñó el sexo como una expresión de amor y unión dentro del matrimonio (Génesis 2:24, 1 Corintios 7:2-5) y lo hizo para que nosotros podamos disfrutarlo. La masturbación, por regla general se realiza como una búsqueda egoísta de placer sexual, por lo que es muy fácil que pueda desviar nuestra atención del propósito divino del sexo: la intimidad y la unión entre un esposo y una esposa. Además, puede alimentar la lujuria y la fantasía en altos niveles, lo cual va en contra de los principios de pureza y santificación (Mateo 5:27-28).

El control de los deseos según la Biblia:

La Biblia constantemente nos insta a ejercer autocontrol sobre nuestros deseos y pasiones (Gálatas 5:22-23). La masturbación puede convertirse en una forma de gratificar impulsos sexuales sin ejercicio de dicho control. En lugar de ceder a la tentación, debemos buscar la fortaleza en Dios para resistirla y vivir una vida de pureza (1 Corintios 10:13).

El egoísmo está destruyendo los hogares.

Una de las peores consecuencias de tantas que hay en esta práctica, es la que lleva a los esposos a destruir y terminar sus hogares por culpa de este hábito; que en su mayoría era practicada por hombres, pero lastimosamente la cifra en mujeres viene subiendo de una manera alarmante. 

Es tan doloroso la cuestión, que muchos hombres y mujeres han dejado de tener relaciones sexuales con sus parejas, porque simplemente están tan acostumbrados a la masturbación y, en la mayoría de las veces acompañado con pornografía, que ya no sienten ningún deseo sexual por su pareja. Lo que nos lleva a ir en contra de la Palabra del Señor, que nos recuerda en (1 Corintios 7:3-5) que el esposo debe satisfacer las necesidades sexuales de su esposa, y la esposa debe de satisfacer las necesidades de su marido.

La Gracia y el Perdón:

En estas instancias es importante recordar que todos somos pecadores y fallamos ante la perfección de Dios (Romanos 3:23). Y si has luchado con la masturbación u otras formas de inmoralidad sexual, no estás solo. Y no puedes permitir que satanás te siga condenando, pues Dios ofrece perdón y restauración a través de Jesucristo (1 Juan 1:9). 

Lo mejor es buscar la ayuda de otros hermanos maduros y considerar buscar asesoramiento en tu iglesia local si enfrentas dificultades en esta área. Entre todos nos podemos ayudar, y recuerda que lo peor que podemos hacer es guardar silencio, y no confesar nuestros pecados, pues Dios es fiel para perdonarnos, si nos arrepentimos.

Conclusión:

Como hermano, mi objetivo no es juzgar a nadie, sino ofrecer orientación basada en la Palabra de Dios, para no permitir que las ideologías y filosofías de este mundo nos engañen.

2 Corintios 10:5 en la Biblia Reina-Valera 1960

derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo.

La masturbación plantea desafíos para muchos cristianos, pero con la gracia de Dios y el poder del Espíritu Santo, podemos vivir vidas que honran a nuestro Señor en todas nuestras áreas de la vida, incluida nuestra sexualidad. Busca siempre la verdad en las Escrituras y la dirección de Dios en tu vida diaria.

Debo asistir a la iglesia: Miralo aquí